esclava del mal

siempre me dió miedo leer sus cosas para tratar de domar ese lado tan horrible de mi personalidad.  había decidido que las cosas serían diferentes; que no mentiría más, ni jugaría al escondite, ni desaparecería estratégicamente como los ninjas.  por otra parte, no me interesaba saber nada.  al dia de hoy aún no sé muchas cosas que debería saber.  la verdad es que si las supiera, probablemente no estaría aquí.  

hoy lo leí todo. 

me complace decir que todas mis conjeturas sobre su forma de pensar, sus debilidades, gustos, placeres y antojos... 

...jamás habían estado tan correctas.